Cuando se presentó Metaverso parecía un conejo en la chistera de Mark Zuckerberg, pero los inversores no acaban de ver la oportunidad.

Meta y su creador se centran  en construir un mundo nuevo que no parece entusiasmar a nadie, que no existe y quizó nunca llegue a cuajar en el mercado.

A principios de mes, tras presentar los beneficios, las acciones bajaron más de un 26%, la mayor caída en un solo día en la historia de la bolsa de Estados Unidos. En total, perdió más de 200.000 millones de euros de capitalización bursátil.

Facebook también ha experimenta descensos muy significativos en número de usuarios, por primera vez en mucho tiempo, lo reduce la facturación y los beneficios por publicidad.

Facebook ya no es tan atractiva para los usuarios y Metaverso no es un hecho

Aunque su negocio actual muestra signos de debilidad, Zuckerberg quiere que los inversores se concentren en el futuro. El problema es que ese futuro no es algo que se pueda dar por hecho.

Hay quien señala que Zuckerberg intenta convenceernos a todos de las maravillas de un mundo virtual de trabajo y juego, pero la realidad es que metaverso, en el mejor de los casos, es un videojuego glorificado y, en el peor, una forma igual de aburrida de estar en la oficina.

Los ciudadanos han visto y conocido demasiados problemas en Facebook como para fiarse ahora. Por ello, sería más fácil para Meta explicar a los usuarios al metaverso pero la gente seguirá desconfiando porque no se fia  de Facebook en particular y de los gigantes de las redes sociales en general. Volvamos al mundo real.