Por Esteban Rodríguez , Co-founder Estudio Cabana
Puede resultar contraintuitivo, pero a veces el mundo gira a lugares favorables que nuestros miedos anticipaban imposibles.
Algo así ha pasado con la experiencia física de las cosas. Ni la revolución digital, ni inteligencia artificial; ni una pandemia que nos obligó a convertirnos en entidades digitales han sepultado la voluntad del ser humano en ‘ser y estar’. Por contra: cuanto más afianzamos nuestra relación con Amazon, más amamos esa nueva panadería de la esquina (que podemos tocar y oler).
También hemos visto muchas marcas que se han resentido debido a las nuevas tendencias tecnológico/empresariales: grandes plataformas unificadas, compras online y servicios de delivery, entre otros.
Sin embargo, hay dos prometedoras tendencias que parecen resistir cualquier envite:
Una de ellas: el minimalismo. Un minimalismo que ha abandonado (tiempo ha) la estética para aplicarse en la funcionalidad: el producto y nada más. Esta línea busca la comodidad del consumidor y el ahorro de su escaso tiempo, por ejemplo: cada vez más marcas ofrecen delivery en sus servicios. El mayor exponente de esto: Amazon (imagen). Sus tiendas ahorran un valioso tiempo en una fórmula de: entras, coges y te vas. Tecnologías como la IoT y la biometría permitirán que este tipo de estrategias crezcan y se afiancen.
En la esquina opuesta: el Parque Temático. Muchas marcas conocen bien nuestra necesidad de tocar, oler y estar. Hay algo en esta procesión
de sentidos que aporta una información inalcanzable a través de una pantalla. A esto se suma otro hecho emocional: nuestro anhelo de lo físico debido sobre todo a la tiranía y la dependencia real de la pantalla digital actualmente. Sin contar con una tendencia cada vez más solida de sentirnos dentro de una historia 360, sentirnos EN ella.
¿Acaso no nos sentimos dentro de un grupo de gente inteligente cuando paseamos por una tienda de Apple? (imagen)
¡La clave no es el producto, sino la percepción de nosotros mismos cuando estamos en ese LUGAR, relacionándonos con esa marca/producto! Este es el point del Parque Temático: el planteamiento atrevido de una identidad-espacio clara y carismática, diferenciada y memorable. Que aluda a cuestiones como identidad y grupo.
Para terminar, una hipérbole: la librería ‘Lello e Irmao’ en Porto (imagen). La considerada Librería más bella del mundo. Entrada: 5€… ¿Librería o Parque Temático?
Se puede leer en el número de febrero de Hi Retail, página 17.
