La capacidad de adaptación a las nuevas tendencias del sector retail serán la clave para la recuperación de nuestro sector.

Tras varios meses marcados por el confinamiento y las restricciones, por fin empezamos a caminar hacia la nueva normalidad. En este contexto, hay ciertos aspectos que serán claves para la recuperación del sector.

Y es que, durante la pandemia, diferentes tendencias del mundo retail que estaban desarrollándose, se consolidaron convirtiéndose en motores clave de nuestro sector. Esta es una realidad que nosotros venimos observando desde hace bastante y, los retos que a continuación mencionamos, no nos han pillado por sorpresa, ya que llevamos tiempo trabajando en ellos.

Uno de los principales desafíos de los centros comerciales es seguir reforzando su papel como punto de encuentro entre el canal online y el offline. Para muchos el e-commerce se ha convertido en el canal ideal para el consumo. Sin embargo, los meses de confinamiento y restricciones nos han demostrado la necesidad del mundo físico y por ello necesitamos más que nunca la existencia de lugares donde vivir experiencias y donde crear conexiones emocionales, tanto personales como comerciales.

El reto ahora es seguir trabajando en esta omnicanalidad, en la que el papel de los centros es ser punto de encuentro entre el comercio físico y el digital, satisfaciendo tanto a consumidores a la hora de realizar sus compras por cualquier canal, como a los retailers y sus nuevas necesidades.

Por otro lado, el comercio es también una pieza fundamental en la construcción del futuro de las ciudades. Por ello, y de cara a la recuperación, los centros comerciales deben seguir apostando por la integración en las ciudades que operan, contribuyendo a su desarrollo social y económico. Para cumplir este objetivo, uno de los pilares clave será seguir trabajando en crear relaciones eficaces y duraderas entre los agentes públicos y privados, una alianza que también ha sido esencial para hacer frente al Covid.