Por Nelson Molero Ferrer, CDO Design Institute of Spain

Para venderle al lado izquierdo del cerebro (el lado racional) se debe apelar a características tangibles. (tanto en lo físico como en lo digital) Para esto el diseño nos ayuda a crear una estrategia donde se consigue darle al cliente una justificación racional de su compra.

Por el contrario, para venderle al lado derecho del cerebro (el lado creativo) debemos apelar a las emociones que siente el cliente y el diseño en este caso nos ayuda a crear acciones que sean memorables y que conviertan la experiencia de compra en un recuerdo utilizando para ello las emociones. 

Para aterrizar lo anterior podemos hacerlo en tres aspectos fundamentales, teniendo en cuenta que los básicos de todo negocio estarán cubiertos:

– Diseño atractivo y moderno de los espacios de contacto físicos y digitales mediante los cuales interactuamos con el cliente, éstos deben de ser coherentes con toda la imagen de marca que deseamos proyectar y con la “theme experience” desarrollada en todos los canales.

– Diseño de una estrategia de experiencia de cliente orientada a la generación de fans, pero no los fans de las redes sociales, sino del verdadero concepto de la palabra fan que es aquel que te defiende, que es el último que se va y el primero que vuelve.

– Por último, una tienda de hoy debe ser sostenible, tanto en términos de su impacto ambiental como en su enfoque en productos éticos y justos. Esto puede atraer a los clientes conscientes de la sostenibilidad y ayudar a construir una marca sólida y confiable.

En resumen, una tienda de hoy debe tener un diseño atractivo y moderno, un servicio al cliente excepcional, una presencia en línea sólida y un enfoque en la sostenibilidad para garantizar el éxito y atraer el interés de los clientes.

Se puede leer en el número de febrero de Hi Retail, página 14.