Por María Alberola, marketing director en URW España
El uso tradicional de los centros comerciales ha cambiado de forma radical en los últimos años.
Se han convertido en lugares en los que estar juntos, compartir planes, descubrir novedades y vivir experiencias, más allá de ir de compras o a comer.
La oferta comercial se ha visto complementada por una oferta cultural, de salud, espacios de coworking, hoteles o incluso centros temporales de vacunación.
Por estos motivos, para mantener el nivel de rentas es clave el alineamiento de los objetivos de marketing y los objetivos de negocio. De este modo, desde marketing podemos aportar información que ayude a definir estrategias comerciales más eficaces: desde nuevas tendencias de mercado hasta insights de consumidor para comprender sus necesidades y brindarles soluciones o experiencias personalizadas.
Cuando nos preguntamos qué debe tener un plan de marketing para atraer el interés de los clientes debemos entender que, como consumidores, la pandemia, la crisis económica y energética y el aumento de los precios nos han hecho vivir en la inestabilidad. Vivimos en un mundo cada vez más complejo y es necesario revisar enfoques estratégicos ante los cambios constantes y la velocidad a la que se suceden.
En este contexto, hay elementos esenciales en una estrategia de marketing. En primer lugar, nuestros planes deben ser más ágiles, flexibles y creativos. Además, la empatía con el cliente y la autenticidad son fundamentales para conectar con las personas en el largo plazo: debemos poner en práctica lo que predicamos y demostrar nuestro compromiso. En cuanto al formato, el content marketing sigue siendo el rey, ya que nos permite llegar a nuestro target a través de contenidos y canales relevantes para él, de forma cada vez más eficiente gracias a las nuevas herramientas de personalización.