Llega la Semana Santa y claro, nos vamos a Sevilla, donde tiene lugar una atención especial para el sentimiento religioso y la vitalidad de un pueblo con la pasión.
La Semana Santa, como es conocido, es una fiesta de carácter cristiano que conmemora la pasión, muerte y resurrección de Cristo, pero en Sevilla es mucho más, las imágenes, la gastronomía, las hermandades y los desfiles. Con ser esto ya mucho, no es todo. Para entenderlo hay que ir a Sevilla y vivirlo.
Una escapada en Semana Santa
Además de los aspectos religiosos, la Semana Santa en Sevilla es un fenómeno de carácter sociocultural, turístico y económico de gran importancia en la ciudad. En 1980 fue declarada de Interés Turístico Internacional y constituye una de las grandes fiestas de primavera de la ciudad. Hay otras como la Feria de Abril, pero la pasión en Semana Santa es inigualable.
Las procesiones constituyen el principal culto externo de las hermandades que también realizan otros cultos internos a sus titulares a lo largo del año, como novenas, septenarios, quinarios, triduos y besamanos.
Dos hoteles
Hotel Alfonso XIII
Encargado por el rey de España para alojar a los dignatarios internacionales durante la exposición de 1929, el Hotel Alfonso XIII, sigue siendo un lugar de interés cultural emblemático.
Situado en el centro histórico de la zona de Santa Cruz, junto a los Reales Alcázares y la catedral de Sevilla, ofrece una distinguida arquitectura y los detalles moriscos, que fueron enriquecidos y ahora muestran una herencia y un diseño andaluces adecuados para otra época.
La decoración del hotel, desde el lobby hasta el patio interno, refleja el estilo típico de Sevilla, un ambiente que invade también el área de la piscina al aire libre y los jardines, lo que invita a los huéspedes a relajarse y renovarse bajo el cálido sol andaluz.
Hotel Convento La Gloria
El Hotel Convento la Gloria ofrece un escenario para trasladarnos al pasado, junto a la Catedral, la Giralda y el Barrio de Santa Cruz, en el corazón de Sevilla. El edificio en el que está ubicado fue un antiguo Convento del s. XV.
Dispone de tres patios interiores a través de los cuáles la luz llena de encanto sus galerías, iluminando de una forma muy especial los artesonados de madera y azulejos que puede encontrar por doquier. El hotel también ofrece un bar con veladores en la calle y un Restaurante llamado Mesón Don Raimundo con una gran experiencia en el sector, abierto desde hace más de treinta años.
Para comer
El Burladero
Un restaurante cuyo nombre nos traslada al ambiente taurino, tan importante en la historia de Sevilla. Ubicado en pleno centro de la ciudad, es uno de los más recomendados en cuanto a tapas se refiere.
Se trata de ofrecer tapas y platos con corazón, producto de calidad y una presentación cuidada al detalle.
A destacar la ensaladilla rusa, los calamares con alioli, el rabo de toro, el pulpo y los flamenquines. El precio de unas tres tapas con bebida por persona es de unos 20 euros.
Comer pescaito
Hay muchas freidurías conocidas y reconocidas. Entre ellas La Isla, el Pescaito, Puerta de la Carne.
