El entonces jefe de Gabinete de Sánchez anticipó hace más de un año detalles sobre los 140.000 millones a un pequeño grupo del que formaba parte David Madí, imputado por financiación ilegal del secesionismo.

Según informa el diario ABC “el entonces todopoderoso jefe de Gabinete de Pedro Sánchez, no pensó que esa cita llegaría no ya a un juzgado español, sino incluso hasta la propia Fiscalía Europea, el organismo que empezó a funcionar el pasado verano para investigar delitos de fraude y corrupción contra los intereses económicos de la UE”.

Las dudas sobre la tramitación de los fondos europeos

El diario explica que David Madí es una especie de Iván Redondo del expresidente catalán Artur Mas y asesor del fugado Puigdemont.

Como añade en su información el rotativo: “David Madí contactó por teléfono con Joan Ferran Oliva, apoderado de una empresa de consultoría y familiar suyo, para compartir con él los detalles de ese programa millonario que el gurú de Sánchez había adelantado a un selecto grupo de la patronal catalana, Fomento del Trabajo, del que él mismo forma parte”.

A continuación, le propuso un negocio aprovechando esa información: buscar empresas que pudieran optar a las licitaciones públicas que se iban a financiar con esos fondos y cobrarles por cada adjudicación obtenida.