Pelayo Capital ha elegido BREEAM®, el certificado de referencia internacional en construcción sostenible, para certificar Breogán Park, un proyecto que apuesta firmemente por la regeneración urbana.

Para conseguir el certificado, en su modalidad “Nueva Construcción”, la promotora ha realizado más de 200 actuaciones sobre el proyecto original. Además de la recuperación y regeneración de un espacio de más 170.000 metros cuadrados, su compromiso con la sostenibilidad incluye la utilización de materiales y proveedores de proximidad, una gestión de residuos óptima, generación de energía a través de placas fotovoltaicas, minimización de consumos eléctricos y de agua o asegurar que el centro es 100 % accesible para personas con movilidad reducida.

La promotora ha realizado, asimismo, un plan con el objetivo de fomentar la movilidad sostenible. Para ello ha contratado a una consultora especializada que ha validado la accesibilidad del proyecto. Con 3 accesos desde 2 calles, tendrá un tiempo medio de viaje desde cualquier lugar de A Coruña de 7 minutos. Además, contará con una extensa cobertura de transporte público con 3 líneas de autobús urbano.

Para Javier Torralba, director de BREEAM® en España, “este proyecto supone una inversión económica muy importante que redunda en la calidad de los espacios privados de uso público, regenerando y recuperando una superficie de gran influencia en la ciudad. Su interés en certificarse con BREEAM es una muestra clara y definitiva de su compromiso con la sostenibilidad, en la línea de las tendencias internacionales en materia de construcción sostenible”.

Por su parte, Íñigo Veiga, director general de Pelayo Capital, destaca que “Breogán Park nace de las necesidades de servicios en Agrela y de la falta de un tipo concreto de oferta comercial en A Coruña. Nuestra apuesta por BREEAM es una muestra del compromiso que tenemos en generar el mayor impacto positivo en nuestra ciudad”.

Beneficios de un edificio sostenible

Un edificio BREEAM reduce el impacto medioambiental de la edificación y promueve la eficiencia energética con ahorros de consumo de entre un 30 y un 70 %, con la consiguiente disminución de emisiones de CO2. Además, conlleva un ahorro en el gasto de agua de hasta un 40 % y llega a disminuir los gastos de funcionamiento y mantenimiento hasta un 30 %.

Del mismo modo, aumenta la satisfacción y bienestar de los usuarios mejorando el ambiente interno y las condiciones de vida y trabajo de los usuarios de los edificios.

Cabe destacar, asimismo, que se incrementan la funcionalidad, la flexibilidad y la vida útil de los inmuebles, aumentando su valor hasta un 7,5 %.